Nuestra productividad y bienestar se ven impulsadas física y psicológicamente por nuestra energía.
Múltiples roles, ciudad atareada… sí, es cierto, pero así como asumes con responsabilidad tus compromisos con terceros, asume con rigurosidad TU tiempo.
El descanso es el secreto, espiritual, psicológico y biológico, para que nuestra energía se recicle, y tanto nuestra mente como nuestro cuerpo mantengan niveles de energía óptimos.
Responsabilízate contigo ¡DESCANSA!