En la sociedad tan agitada en la que vivimos actualmente, la idea del suicidio ronda sobre la sociedad como un ave de mal agüero. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), un promedio de 3.000 personas le ponen fin a su vida diariamente, muchas de ellas, ante un cuadro de depresión. La prevención del suicidio es una tarea que, además de posible, amerita de un trabajo integral para alcanzarlo.
Como en el mes de septiembre se celebra el Día de la Prevención del Suicidio, en EcoSalud quisimos indagar en las herramientas para enfrentar estos casos, por lo que conversamos con nuestra psiquiatra la Dra. Mayra Cortez, especialista en el tema.
Cortez asegura que la prevención del suicidio se divide en dos etapas: la primaria que se caracteriza por tratar de fortalecer el autoestima de las personas, evitar el maltrato familiar y las comparaciones, así como trabajar por tener una familia funcional. Además, mantener una vida sana, libre de drogas y consumo excesivo del alcohol también son herramientas para la prevención de posibles suicidios.
“Para evitar que una persona pueda llegar a deprimirse, hay que buscar herramientas para fortalecer la personalidad y evitar que a nivel social, familiar y personal hayan factores que disparen un problema depresivo”, afirma Mayra.
La otra etapa de prevención es aquella de carácter secundaria, es decir, cuando la persona ya presenta un cuadro depresivo profundo. Mayra es enfática al plantear que “deprimirse no es estar triste o preocupado, la depresión es no poder manejar las emociones, llegando a afectar otros aspectos de la vida como el sueño o el apetito”.
Es en este punto donde la depresión y el suicidio convergen. Como el pensamiento se ve alterado –por fallas en los neurotransmisores cerebrales que controlan las emociones- las ideas sobre la vida son cada vez más negativas y pesimistas, pudiendo llevar a la persona a tomar la decisión de quitarse la vida.
De acuerdo con Cortez, en casos como estos el tratamiento se enfoca en tres áreas: la farmacológica, la cual ayuda a mantener los neurotransmisores equilibrados; la psicoterapéutica que “ayuda al ser humano a tener herramientas internas para fortalecer el pensamiento positivo y ver otras facetas de sí mismo que antes no veía. Es un proceso un poco más lento pero que puede mejorar el autoestima del individuo”, todo esto para prevenir una situación detonante como el suicidio. Acudir a la ayuda de especialistas es fundamental para prevenir el suicidio o cualquier enfermedad mental.
Por último, el apoyo familiar también es vital. La función de la familia es informarse sobre la depresión y cómo incide en conductas suicidas, así como también tratar de comprender al paciente que atraviesa esa situación sin que represente una presión para él. La familia debe estar allí para acompañar y hacer sentir querida a la persona.
Promover la salud mental, apoyar a quienes atraviesan situaciones difíciles, atender su estado emocional, fortalecer las redes de apoyo, evitar el consumo de sustancias psicotrópicas y buscar la ayuda de especialistas son algunas de las herramientas de prevención. En EcoSalud, la doctora Mayra Cortez brinda sesiones de atención a pacientes los lunes, martes y viernes entre las 2:30 hasta las 7:30 pm y los miércoles entre 8:30 am y 12:00 pm. En nuestras manos está la prevención, ¡trabajemos en equipo para proteger la VIDA!