Todos los días suponen retos diferentes y la meta siempre es cumplir con todos ellos. Sin embargo, es necesario aprender a hacerlo de una manera saludable ya que la tensión que puede generar una jornada muy ocupada o con muchas labores pendientes afecta tu salud, con manifestaciones como estrés crónico, ansiedad, malestar, etc.
Vivir en bienestar es nuestra responsabilidad y, por eso, nuestra salud mental y emocional también lo es. Garantizar diariamente un respiro al cuerpo y a la mente asegura no sólo un mejor rendimiento en nuestras labores sino además una relación más armoniosa con el trabajo.
Disfrutar los pequeños espacios de tiempo libre es un arte porque, aunque parece sencillo, usualmente lo desperdiciamos en pensamientos o acciones inútiles. Cuerpo y mente deben ser recompensados así que ¡reconoce sus esfuerzos y prémialos! No debes esperar al fin de semana, puedes prevenir el agotamiento con pequeñas acciones.
Aquí algunos tips
Lo primero que debes tener en cuenta es dedicar 20 minutos del día a generar pensamientos positivos, imagínate en un lugar que te guste, con tus personas favoritas y transpórtate. Regálale alegría a tu mente.
Cuando sea hora de comer concéntrate en ese momento y elimina todos los demás pensamientos de tu mente. Este debe ser un momento tranquilo para que tu cuerpo digiera y aproveche todos los alimentos.
Además, antes o después de almorzar puedes aprovechar para dar un paseo. Caminar diariamente te permite conectarte con el mundo, observar lindos paisajes, sentir el sol, la brisa… Revitalizarte. Esto también contribuye con tu proceso creativo, incentivándolo.
Por último, ¡Date un gusto! Prémiate con algún dulce o fruta que te encante, de esta manera tu cuerpo genera endorfinas, la hormona de la felicidad y tu mejor aliada para un día lleno de alegría y positivismo.